2008 - El año chipichanga: Nacimiento de la polémica (1ª parte)

Terminaba el Carnaval 2007 y lo único que tenía claro en mi mente, era que para el carnaval 2008 saldría solamente en Huelva capital. Pasé unos carnavales inolvidables y a día de hoy, imborrables en mi memoria, pero aquello era un sacrificio y traía muchos quebraderos de cabeza en cuanto a salir en un grupo de allí y un grupo de aquí (resulta utópico pensar que yo viva en Huelva y para el 2008 saliese sólo en un grupo de el Puerto. Eso no se lo cree nadie. Ni yo mismo).

La duda venía a la hora de saber en qué grupo onubense iba a salir para el 2008. Habían tres opciones:

a) La comparsa de Fali Ramos. Fali quería volver a sacar su comparsa para el 2008.
b) La comparsa de Diego Vega. Tras el homenaje a Paco, Diego quería contar con la base del grupo que cantó en el homenaje, entre ellos yo.
c) La comparsa de Cristobal Giraldo. Cristobal quería regresar para el 2008 a la modalidad de comparsa, con la base de su comparsa de siempre de Independiente, pero con sabia nueva (Kiko, Pillinchi) y gente que volvía a un cuarto de ensayo con Cristobal (Pepito Ferrer, Javi Machuca, David el loco, etc.)

En un primer momento, la opción que más tuve en cuenta fue la primera, puesto que llevaba mucho tiempo queriendo salir con Fali Ramos, en una comparsa sacada por él.
Sin embargo, los rumores situaban a la posible vuelta, como un espejismo como el de todos los años y que al final Fali mismo, me acabó diciendo que tenía dudas en sacarla o no, que no estaba del todo decidido.

Esa incertidumbre, me hizo descartar esa opción, puesto que me negaba que me volviese a pasar lo del verano-principios de Otoño del año 2005.

Entonces en esos días, me llamó Diego Vega y se puso en contacto conmigo para decirme que contaba conmigo para su comparsa y que le diese mi palabra y mi compromiso para salir con él.
Yo ya había salido con Cristobal Giraldo y la opción de Diego Vega, como lo novelero y diferente, me atraía, en un principio más.

Con lo cual, me subí al carro de un proyecto que suponía la vuelta a las tablas del Gran Teatro (y del Falla, entre otros), de la comparsa de Diego Vega.
De hecho, cuando Diego me llamó, una de las características que definían al proyecto de su vuelta, era el concursar en Cádiz.
Diego, en un ensayo, dijo que uno de sus máximos objetivos, realmente, para su vuelta, era el de conseguir el pase a la siguiente fase del COAC, que ya por aquel entonces, iban a ser los cuartos de final.

Para una persona que acababa de debutar en el Falla, como yo, y que tan gratísima primera experiencia tuvo en aquel teatro, era una de las características que más me atraían de su proyecto, junto al hecho en sí de salir con Diego Vega.
A mi siempre me ha gustado Diego Vega, de hecho, una de las comparsas que han pisado las tablas del Colombino, más inolvidables para mi, ha sido Almonteño.

Los primeros ensayos me motivaban. El grupo tenía muchas ganas y estaba ilusionado con el proyecto. Esos primeros meses estuvimos ensayando cosas de la antología de Diego Vega ("De mar y cielo", "De madera", "Almonteño") y estaba disfrutando realmente con la comparsa. En el grupo había gente como Diego Vega, Jesuli, Blasmi, Pope, Toni Machuca, Hnos Peguero, Victor, etc.

Sin embargo, paradójicamente, los problemas comenzaron a llegar.

Diego vega volvería a ser padre. Una magnífica noticia para cualquier persona, no cabe la menorísima duda. Lo que sucede, que esa magnífica noticia, trajo sub-indirectamente, un problema a la comparsa. Diego Vega no sabía realmente si podría salir como componente en la comparsa. En un principio no saldría, puesto que su paternidad llegaría por Enero.

Esto suponía dos problemas:

a) El menos importante, es que Diego no saldría como guitarra.
En el mes de Abril, se incorporó a la comparsa Manolito el púa. Evidentemente, se trataba de un gran fichaje para Diego y para mi, lo que pasaba es que yo andaba con incertidumbre, puesto que la única vez que había trabajado con Manolo, no terminábamos de entendernos a nivel de dos músicos que deben formar una sóla música.
Evidentemente esta cuestión se minimizó con el compromiso de Diego, de llevar y controlar las guitarras por su parte. A mi realmente me daba igual ser quien punteara más o menos, eso era lo de menos para la aportación general de los tres guitarras a la música de la comparsa. A mi me preocupaba que no hubiese compactación, compaginación y unión. Diego me dijo que él iba a estar controlándolo puesto que iba a ser el guitarra principal.
¿Qué sucedía?
Que esas palabras se vinieron abajo, con la decisión de Diego de no salir en el grupo como componente.

b) La más importante, que más me influyó negativamente:
"Dudo mucho que vayamos a Cádiz, puesto que yo no voy a poder salir"
"No creo que vayamos a Cádiz, teniendo en cuenta lo de Diego"

Lo único que le pido a los carnavales, es poder pisar cada año mis dos teatros. Mi teatro de Huelva y mi teatro del Falla. Mi madre y mi novia. Mi tierra y la tierra de las coplas de carnaval. Ya había probado la droga de aquellas tablas y no era capaz de dejarla.
Respeto a quien no lo vea como yo, pero espero que quien no lo vea como yo, me respete a mi. Hay quien es del recre y del real madrid, pues a mi me pasa lo mismo como aficionado al Carnaval.

Entonces a partir de Septiembre todo se empezó a torcer. Junto a estas dos cuestiones, se sumaba que en los ensayos no me encontraba del todo agusto como al principio. Notaba a la gente diferente, como si yo no terminase de congeniar con el grupo. No sé si por mi edad, mi forma de ver el carnaval, mi forma de ser, etc., por lo que fuere, no terminaba de estar agusto.

Ese mismo verano, aún en la incertidumbre, me acuerdo que vi en las colombinas a Francis Tinoco, director de la comparsa de La Tarantela, en la que ahora salgo. Yo iba con mi hermano y mi hermano lo saludó y yo hice lo mismo, aunque él, por aquel entonces, sólo me conocía de vista y de oídas. Yo cuando le saludé, le pedí sitio en su comparsa y él me comentó lo mismo que comenta todos los años a todo el que quiere entrar en la comparsa: "Hasta que no se vaya nadie, no me pongo a replantear el meter a nadie". Aún así le dí mi movil y le dije que me llamase para comunicarme si había algún hueco o para comunicarme que no lo había.

A mediados de Septiembre, todo seguía igual con mi comparsa, aunque yo no quería precipitarme en irme de la comparsa tan rápido. Era un decisión que me la replanteaba mucho, antes de tomarla. Independientemente de que tuviera con quien salir o con quien no salir, no me encontraba bien en la comparsa.

Entonces llegó la gota que colmó o bozó (como decimos en Huelva) el vaso. Victor y Toni Machuca, que iban en la comparsa, comunicaron su decisión de dejar el grupo.

En aquel momento, me dije a mi mismo: "Vete". De hecho, Diego Vega, esa misma noche, invitó al resto del grupo en que si hubiera alguien más que quisiera irse, que se fuera. Lo que pasa que en carnavales hay veces que las decisiones las tomas con naturalidad, sin premeditar nada, sin cuidar detalles a la hora de como irte y de decir las cosas como son y pasa lo que pasa.
Yo en ese mismo momento no me quería ir, porque estaba estudiando a fondísimo la situación. Pero se malinterpretaron los hechos.

La noche antes de que Toni y Victor se fueran de la comparsa, fui al ensayo de la comparsa de Cristobal Giraldo.
Durante ese mismo año, tanto Cristobal, como Iván, como Kiko y como varios componentes más, me habían repetido hasta la saciedad que saliera con ellos, que dejase a Diego Vega y demás. Todo ello, sin saber nada, absolutamente nada, de mi situación y motivación en la comparsa de Diego. Cada vez que no he salido con Iván, siempre me ha propuesto salir con él (este mismo año lo ha hecho 5734043 veces), porque es mi amigo y es normal que me proponga hasta la saciedad salir con él. Yo mismo le he propuesto miles de veces que salga en mis grupos.

Sin embargo, el simple hecho de asistir esa noche al ensayo de Cristobal Giraldo dio lugar a malentendidos.
Esa misma noche, en ese ensayo, me volvieron a proponer salir. Yo, que no sabía que hacer aún, hice un comentario que realmente lo sentía de tal forma:

"Cristobal, sinceramente, ahora mismo, si me dijeras que vais a ir a concursar a Cádiz, me replantaría el salir con vosotros, la verdad, lo tengo que reconocer".

Bien. Habéis leido como estaba la situación y como fueron las palabras. Esas palabras, se filtraron y alguien de la comparsa de Cristobal que las escuchó, se lo dijo por la mañana del día siguiente, a alguien de la comparsa de Diego Vega (concretamente a Jesuli).

Con lo cual, teniendo en cuenta que fui un Jueves a ver el ensayo de Cristobal y que cuando Toni y Victor se fueron, fue el viernes, al día siguiente; en el momento que Diego Vega preguntó al grupo si alguien más se iba a marchar, ya ellos tenían conocimiento de ese comentario en la comparsa de Cristobal.

Pues bien, ese fin de semana me fui a Cádiz a pasarlo con mi, por aquel entonces novia. De vuelta del viaje, con la radio apagada, pensando, acabé decidiendo dejar la comparsa de Diego Vega y comunicarle a Diego al día siguiente, que lo dejaba.

Eso hice por la mañana y llamé a Diego. Expuse las razones de mi marcha basadas en que él no saliese en la comparsa y los dos problemas que anteriormente expuse, que ello conllevaba. La reacción de Diego fue mostrarme que ellos se habían enterado del comentario en el ensayo de Cristobal y que al día siguiente, preguntaron si alguien se iba a marchar, precisamente a sabiendas de ese comentario. Y que yo me iba, porque Cristobal me había ofrecido salir con ellos.

De ser así, ni hubiera empezado a ensayar con él en marzo, porque Cristobal me estaba ofreciendo salir con él, desde carnavales del 2007.

Junto a esa teoría de la conspiración, sobre la hipótesis de que yo me fuese de la comparsa, para salir con Cristobal Giraldo, me culpó de que el devenir de la comparsa era negro, a causa de mi marcha. Que por culpa mía, la comparsa no iba a poder salir.

Yo soy consciente que por aquel entonces estaba gordito, pero creo que estuviera para ponerme como un ser humano que valía más que dos (física y/o artísticamente), y que mi marcha fuera la causante de un supuesto mal futuro para la comparsa, más que la marcha de dos componentes, como Victor y Toni.

Después de aquella llamada de teléfono llena de acusaciones, me puse manos a la obra para replantear mi futuro para el próximo carnaval 2008.
Evidenemente, las acusaciones de Diego eran falsas. Yo no me había marchado de su comparsa para salir con Cristobal Giraldo. Lo único cierto que había era ese comentario. Comentario que únicamente apostillaba que si Cristobal aseguraba ir a Cádiz, yo me replantearía, entre mis posibles opciones de dejar la comparsa de Diego, que estaba practicamente pendiente de un hilo, la comparsa de Cristobal Giraldo, como opción.

Fijarse como es el asunto, que después de llamar a Diego Vega, la opción de salir con Cristobal Giraldo no estaba ni entre las primeras.
La mayor de las opciones, estaba en Punta Umbría, esperando a que un señor llamado Francis Tinoco me llamase. Ni rastro de llamada perdida ni nada. No me llamó.

Esa misma semana, Jesús Monje, autor de música de la comparsa Jamaica, me propuso salir de guitarra con él en su comparsa para el 2008, que la sacaría con letra de Fali Pastrana. Los ensayos en Cádiz y la misma dinámica de ensayos que Jamaica. Lo que pasa que había gente del grupo que no estaba de acuerdo en que yo ensayase cada dos fines de semana.

Pasaron dos semanas. Dos semanas. Dos semanas, después de la decisión de irme de la comparsa de Diego Vega y entonces Cristobal Giraldo, me llamó y me dijo que seguramente iríamos a Cádiz y que estaba tardando en ir a ensayar.

No me lo pensé ni un momento. Al día siguiente estaba ensayando con ellos, como un chipichanga más, que era la idea que Cristobal tenía para el 2008.
La misma que tenía para el 2007 y que se quedó en el tintero.
Esa misma idea, vería la luz...

CONTINUARÁ.

2007 - Confirmado. El carnaval no tiene fronteras.

Aquella noche de Febrero, Cristobal Giraldo me abrió conversación en el Messenger, que por aquel entonces sería la edición 7.5 o menos. Me propuso la idea de volver a su comparsa, mejorando algunos aspectos de mi mismo y con la idea de hacer algo curioso con una idea que Cristobal estaba barajando para aquel año venidero. Se trataba de "Los Chipichangas", un tipo muy onubense que Cristobal ya estaba maquinando para sacarlo a la luz. A partir de mi entrada en la comparsa de Cristobal, yo ya había dejado a la chirigota después de la discursión por el dinero que habíamos ganado, aunque en realidad era una excusa superficial para la verdadera intención de fondo que tenía en dejar aquella modalidad en la que ya había cumplido un ciclo. He de reconocer que en ocasiones me veía en los videos de las chirigotas donde he salido y no me veía como un chirigotero, sino que veía a un comparsista saliendo en una chirigota. De no haber habido mamoneos por el dinero, seguramente también hubiese dejado la chirigota y hubiese sido por el hecho de querer de dejar la modalidad, con toda sinceridad, por lo que se trataba de la crónica de una muerte ya anunciada.

Tras dejar la chirigota, como iba a salir con Cristobal Giraldo para el próximo 2007, comuniqué a mi comparsa, aquella que parí musicalmente, que iba a salir con Cristobal y demás y que dejaba la comparsa. No sentó mal la decisión teniendo en cuenta que era una decisión tomada casi a final de carnaval, para el próximo carnaval (que no era una decisión tomada en Octubre o Noviembre, ni mucho menos).

Durante los meses de Abril y Mayo, quedé varios días con Ivan Giraldo para empezar a montar cosas con la guitarra. Iván en Los Animados (2006) salió tocando la guitarra y para el año siguiente, Cristobal también lo quería de guitarra, por lo que la idea era salir él, Manolito Alvarado y yo de guitarras. Montamos entre otras cosas el punteo de la presentación de la Caldera y el del pasodoble del año siguiente, que ya lo teníamos listo y montado. Lo jartible que puede llegar a ser uno...

Transcurrió el verano y sin embargo empezaron a escucharse voces y rumores de que Cristobal quería descansar y no quería salir. Yo no me los creía, puesto que cada vez que preguntaba a Cristobal, me respondía que él quería salir.

Una noche de verano visité el ensayo de mis ex-compañeros de la comparsa "La Oveja Negra" que ya estaban ensayando. Muy buen rollo con ellos e incluso me propusieron volver y demás. Pero yo estaba comprometido con Cristobal y mientras Cristobal siguiese, iba a salir con él.

En Colombinas y demás seguía viendo a carnavaleros que seguían soltándome que habían escuchado Cristobal no iba a salir y el río comenzaba a sonar poquito a poco.
Hasta tal punto que un día Cristobal convocó una reunión de la comparsa y comunicó su decisión de no salir para el año siguiente. Su intención era la de descansar, sobre todo en la modalidad de comparsa en la que llevaba varias décadas ininterrumpidamente.

Al salir de aquella reunión, llamé a Rafa González y le comenté que estaba sin grupo. Al día siguiente tenían ensayo y ese mismo día me incorporé a la comparsa.
La comparsa tenía la base de La Oveja Negra con varias incorporaciones nuevas que venían a suplir a los que se habían ido de la Muralla. La música la hacía el maestro Jesuli Perogil y la seguía afinando Willy, hasta que se tuvo que ir a canarias a trabajar o estudiar creo, y Rafita se encargó de la afinación.

Mi futuro para el carnaval 2007 era volver a salir con aquella comparsa, con la que de verdad vivi grandes momentos, sobre todo en el año 2006. Bueno el futuro estaba dictado o casi...

Dicen que el carnaval no tiene fronteras y cada vez que han dicho tal afirmación siempre asentaba con la cabeza y no le prestaba atención a lo que realmente significa esa frase.
En aquel momento yo mantenía una relación con una chavala de Cádiz, gracias al carnaval, por cierto y recuerdo que en uno de esos días en los que estuve en Cádiz, nos invitaron a un ensayo de una comparsa de El Puerto de Santa María. Tenía muchísima curiosidad en escucharla porque Jesús Monje se había hecho cargo de la música y la afinacion de la misma.
Cuando llegamos al Puerto, esa tarde, Yo, mi ex novia y Cristobal, un amigo de ambos de un pueblo de la sierra de Cádiz, quedamos con dos de los componentes de la comparsa en cuestión: Bora y Nico.
En esa charla tomando café comentaron que la comparsa iba perfecta pero que les faltaba un punteao y entonces poco a poco, Cristobal, fue soltando que en la charla estaba presente un punteao de Huelva. No fue a más..
Llegamos al ensayo y comenzamos a escuchar la comparsa. Aquellas músicas y aquella forma tan portuense y gaditana me enamoró. Aquellas voces, aquellos guitarras, aquella percusión. Era como si me adentrara en un mundo nuevo.

Al terminar el ensayo, se me acercó el director, Raul Villanueva y me dijo:

"Tú eres Juanfran ¿no?"
"Sí"
"Me está diciendo Nico que tú sabes puntear"
"Estamos ahí aprendiendo...je,je"
"¿Nos puedes tocar algo?"

Me prestaron una guitarra y toque´una antología de introducciones a presentaciones y pasodobles de Cádiz.
Al terminar me vino Raúl y me dijo:

"¿Quieres salir punteando con nosotros"
"Me encantaría, pero soy de Huelva. Vamos, que vivo allí"
"Bueno no pasa nada. ¿Cuándo podrías venir a ensayar?"
"(Incrédulo por aquel instante)..Pues cada dos fines de semana
(En este momento, pensaba que se acababa la proposición...)
"Pues bienvenido a la comparsa".

Durante aquellos primeros días, al salir de aquel local de ensayo, no daba crédito a la decisión que había tomado. Era una locura en toda regla, salir en el Puerto de Santa María, viviendo en Huelva y yendo a ensayar cada dos fines de semana.
Una locura que era más preciosa que imposible. Además, no tenía pensamientos de dejar mi comparsa La Muralla y pretendía hacer el doblete de los dobletes: salir en una comparsa de Huelva y en una comparsa de El Puerto de Santa María, ambas adultas.

Comuniqué la decisión en mi comparsa. Dije que me había surgido una oportunidad de tal calibre, pero que no me gustaría dejar de salir con ellos y que podría hacer doblete. Eso sí, dentro de las condiciones estaba que la comparsa portuense tuviera prioridad, a pesar de haber entrado en último lugar, era realmente mi prioridad y en ese sentido, aunque suene mal, no quise dejar de salir con La Muralla, siempre y cuando se me permitiese acudir al mayor número de compromisos con los del Puerto.

Con los del Puerto no fui a ensayar hasta 3 fines de semanas después de la decisión. Ensayábamos en el barrio portuense de la Vid, en el trastero de un bar llamado "El Rincón del Puerto". Nos veía a ver gente por la ventana de vez en cuando. Jesús Monje no iba normalmente a los ensayos que yo asistía, pero cada vez que yo iba a un ensayo, días antes había cambiado la comparsa por completo con coros nuevos, octavillas nuevas, cuartetas de popurrit nuevas, etc.

Mi trabajo con la comparsa consistía en trabajar durante 2 semanas, en mi casa de Huelva, el montaje de punteos, para llegar al ensayo, los dos días que asistía cada fin de semana, y montarlos con el grupo, para que se familiarizasen con él y demás.

Por otra parte en ese momento tenía casi sacado todo el montaje de punteos de La Muralla desde septiembre por lo que tampoco me restaba tiempo para la otra comparsa. Además, como ensaya diariamente con La Muralla, tenía la oportunidad de incluir punteos sobre la marcha.

Con La Muralla iba todo fenomenal, ensayaba diariamente, aunque la comparsa tuvo muchos altibajos y llegó a estar pendiente de un hilo meses antes de ensayar porque sufría muchos inconvenientes con respecto al grupo y su afinación. Sin embargo, se hizo lo que se pudo y se tiró palante.

El sorteo del COAC, el primero que veía en mi vida y el primero en el que entraba en el bombo, una comparsa en la que yo salía, nos hizo que nos tocase cantar con Jamaica. un domingo, junto a la comparsa de los hermanos Alcantara "El Ensayo", junto a la comparsa de Algeciras "Yo soy el Marino" y justo antes de la comparsa de Juan Carlos Aragón "Araka la Kana".

Que por cierto, nos llamábamos La Muralla, con la comparsa onubense y Jamaica, con la comparsa portuense. La Muralla iba representando a centinelas de la antigua muralla que hipotética e históricamente se ha atribuido a Huelva durante la Edad Moderna y periodos anteriores. Jamaica representaba a una tribu de jamaicanos que llegaban a Cádiz y se enamoraban de la Tacita.

Llegó el día más esperado de todos, porque fue una experiencia muy especial. Antes de ese día, ese domingo, creo que podría haber visto ese teatro, en videos, unas 500 veces y había escuchado agrupaciones sobre esas tablas, el doble de veces.
Se trataba de cantar en ese sitio que siempre había sentido, pero nunca había vivido.
Me acuerdo que ese día nos maquillaron en la Peña Flamenkito Apaleao, y Piarlé se encargó de "maquillarnos" (fue un desastre de maquillaje para ser una de las firmas más conocidas de la ciudad). Llegamos al Falla haciendo pasacalles jamaicanos y entramos para dentro de los camerinos. La pasarela que te encuentras nada más que entras, las escaleras hacia arriba, el camerino donde dejas la funda de la guitarra y los trastos con la botella de manzanilla o vino fino (el vino fino es lo que diferencia al Falla de otros teatros, a mi me gusta mil veces más que la manzanilla), el cuarto de calentar voces, la puerta de entrada al escenario...todo.
Lo estaba viviendo. En ese momento veía a unos señores con un disfraz espectacular y un maquillaje celeste que se trataba de la comparsa Araka la Kana. Tenía enfrente mia a esa comparsa que después consiguiese el primer premio. Todo era impresionante (del verbo impresionar). Entramos para dentro y ¡zas!: fuera nervios. Era inexplicable como en cuanto entras en ese escenario se te esfuman los nervios.

Aún sigue gente preguntándose por qué este año El Capitán de la Playa se ha inscrito en el Falla. No entiendo como se lo pueden preguntar. Ese teatro me marcó de por vida y una de las cosas que más en claro saqué cuando terminé aquella maravillosa experiencia, es que intentaría, por todos los medios, repetirla cada año.

Aunque aquel año no fue la única experiencia bonita que viví. El hecho de traerme a Huelva, a la comparsa del Puerto de Santa María, en la que yo salía, era otro hecho fascinante. Quedar con ellos en la entrada de Huelva, maquillarnos en la peña el choco contaminao, tener que llevarlos al centro de Huelva para ir al teatro, etc.

Me pasó lo mismo que el año anterior y que me pasa cada vez que salgo en dos agrupaciones adultas: canto un día en el teatro con una y al día siguiente con la otra.

Al día siguiente de Jamaica, me tocaba La Muralla. Más nervios aún porque se trataba de una comparsa de mi ciudad, ante mi público, mi gente.
Si el Falla me quita los nervios por determindas razones, el Gran Teatro me los da, por otras. Es mágico lo que se siente en cada momento.

Lo cierto es que el hecho de actuar con Jamaica y tener que coger rumbo a Cádiz, afectaba a la comparsa La Muralla, pero era lo apalabrado desde el momento de la decisión. Me acuerdo que tras la actuación en el Falla fui varias veces más: el fin de semana que decían quien pasaba a semifinales, que lo vivi en la plaza del Falla, donde no pasamos y que por cierto, sí lo hizo el Desembarco de la Chirla; un jueves para grabar el CD de Jamaica, el fin de semana primero de actuaciones en el Puerto por tablaos y en el concurso de "pasodobles al Puerto" (donde le ganamos a los gitanos, por cierto) y el fin de semana segundo con una actuación en Chiclana, en los tablaos del Puerto y en el concurso de Trebujena.

Nunca había actuado en ninguno de esos sitios. Era genial. Repetiría la experiencia si pudiera, como pude, en aquellos momentos, otra vez. Aunque siempre he dicho que después de la experiencia en el Puerto, me toca una experiencia en Cádiz capital, que como más adelante veréis, cada año va a existir la oportunidad de poder cumplirla que siempre fracasa, por un motivo u otro.

Igual que la oportunidad de salir en la comparsa de Punta Umbría. Ese año fui a felicitar al Carmelo en el Gran Teatro por su pase a semifinales y me dijo, en toma de broma, que estaba enfadado conmigo porque habían estado 2 meses faltandoles dos guitarras y que yo he tenido la poca verguenza de irme a salir al Puerto. De haberlo sabido, hubiera estado en mi comparsa ya desde aquel año, pero vamos que la vida daría muchas vueltas y al final acabaría como he acabado en ella, pero fue desde aquel año cuando empecé a mover cielo y tierra para entrar en mi comparsa, como más adelante veréis.

Bueno, en definitiva, el carnaval 2007 me sirvió para saber que el Carnaval no tiene fronteras. Que maravilla de fiesta, la verdad, no me canso de decirlo.

Y para introducir un poco lo que depara para el siguiente capítulo del 2008, me gustaría comenzar diciendo que ese mismo 2007, en el mes de Enero, se celebró un Gala en honor a la memoria de Paco el largo, que falleció en Diciembre del 2006 en un accidente de tráfico, cuando su peña del recre, iba a Madrid a ver el Real Madrid-Recreativo. En esa gala participé con un grupo formado por Diego Vega y excomponentes de sus anteriores comparsas.

Desde aquella participación en la gala, comenzó a rondar la idea de crear una comparsa del regreso de Diego Vega....

2006 - La despedida chirigota y algo más

Cuando terminé el carnaval 2005, me acuerdo que, en una conversación de Messenger, le pregunté a Cristobal Giraldo: ¿y para el año que viene qué?. Cristobal me respondió que la comparsa seguía, pero que no tenía claro qué hacer con los tres guitarras. Eso se debía a que ese año iba a volver a la comparsa Manolito el púa y entonces iba a tratar de dejar cuatro guitarras los primeros ensayos y ya después decidiría él mismo: a/ si prescindir de uno; b/ o que uno se marchase por su cuenta.

Esta última opción fue la que sucedió. Los primeros ensayos de "Los Animados", que era la idea que Cristobal Giraldo tenía pensada para el 2006, fueron pasando y yo no terminaba de estar agusto en aquel nido de incertidumbres. Me acuerdo que en ese momento no me entendía bien con Manolito y cada uno íbamos por nuestro lado. Se preveía un montaje de guitarras enbarullado, descompacto y descuidado. De todas formas no es por culpa de ninguno de los dos, o que ninguno de los dos no tuviese la actitud de compactarnos, sino que en ese momento no nos entendíamos. La gente habla de nosotros que estamos picados y demás, y realmente no saben si Manolito y yo podríamos trabajar juntos y hacer un éxito en el trabajo, porque nunca hemos pasado de varias semanas trabajando juntos con la guitarra. El tiempo, si coincidiésemos, será quien hable.

La cuestión no era esa, sino que yo no sabía si realmente Cristobal iba a contar conmigo al 100%. No me decía que no contaba, pero yo no veía con seguridad mi estancia en la comparsa.

Entonces, vino esa señal que te marca el destino y que en momentos de incertidumbre te hace tomar una decisión trascendental que te marcará en ese momento.
Mi hermano Diego me llamó a casa diciendome que Jesús el de la cabra, iba a sacar una chirigota y que tanto él, como Raúl iban a salir en la misma. Sólo faltaba yo y ya estaríamos los tres hermanos en el mismo grupo.
La verdad es que es un objetivo que los tres nos hemos marcado, el de salir un año juntos, pero nunca lo hemos conseguido, por un motivo u por otro. El año de Perlita de juerga (2001), mi hermano Raúl también venía con nosotros, pero en Noviembre se fue a una comparsa.

Este año, lo que sucedió, fue que a mi hermano Diego le cambiaron el turno de trabajo, entonces no pudo salir con la chirigota.
Yo reconozco que una de las razones por las que me animé a tomar la decisión de irme con la chirigota, fue salir con mis dos hermanos, aunque en realidad tomé una gran decisión, con respecto al hecho de salir en la chirigota en sí.

Entonces llamé a Cristobal y le comenté que dejaba la comparsa y que iba a salir en una chirigota con mis dos hermanos (mi hermano Diego no dejó la chirigota hasta verano y a Cristobal se lo comuniqué en Abril).

Ya con la decisión tomada, esperé con impaciencia que llegase el momento de reunirnos un día y hablar y comentar cosas de la chirigota. A mediados de Junio, un día antes de empezar el Verano, nos reunimos. El grupo era una fusión entre la chirigota de la Cabra Ajorká, en la que yo saliese de jurado y segurata en el 2000 y 2002; y la otra parte del grupo era de la peña de la Noria, entre los que estaban Willy, Blanco y un desconocido Manu Suero.

Se quedó en empezar a ensayar a partir de mediados de septiembre y en que nos llamaríamos "Entre polvo y pico, un cigarrito" e iríamos de albañiles salidos que van piropeando a todas las mujeres que pasan por su obra.
La idea era muy buena y decidimos tirar palante.

Ese verano, como ya dije, mi hermano Diego decidió dejar la chirigota por incompatibilidad laboral, pero a pesar de eso, decidí quedarme.
Sin embargo, mi futuro en el 2006 no se veía solamente en una chirigota.
Una tarde de finales de Agosto yo me encontraba en un chat de carnaval (el mítico #carnaval_red) y se puso en contacto conmigo un chaval de Lepe (David). Este chaval me dijo que venía de parte de Rafa González, el compañero de trabajo de mi hermano Raúl (que por aquel entonces era ex compañero de trabajo porque ya estaban en tiendas diferentes). Me pidió el teléfono para darselo a Rafa y Rafa ya hablaría conmigo.
Rafa me llamó y me propuso la idea de participar en la autoría de una comparsa. Él haría la letra, junto con David el lepero, y la autoría musical correría íntegramente a cargo mia.
Yo, evidentemente, le pregunté por el hecho de que sucediese lo mismo que pasó para el proyecto de comparsa del año anterior, de los jóvenes de la colombina, en el que Rafa propuso la idea de que su hermano hiciese la música, y me dijo que eso no volvería a suceder y que en esta ocasión yo haría toda la música desde principio hasta el final. Que me daba su palabra.

La propuesta de llevar a cabo lo que el año anterior no pude conseguir, me pareció una gran oportunidad. Nunca había compuesto músicas y se trataba de una oportunidad de oro, porque estaban poniendo toda la confianza en mi capacidad musical y no iba a desperdiciarla ni mucho menos.

Lo curioso de todo esto, es que yo solamente iba a ser autor de música de la comparsa, e iba a salir con la chirigota. Pero claro, pensar que yo iba a hacer solamente la música y que no iba a acabar saliendo en la comparsa, era una utopía para un hombre con un currículum en dobletes como el mío.

Empezamos los ensayos con la comparsa a principios de Septiembre y conforme pasaban los ensayos, la falta de gente y de dos guitarras, indujeron que acabase forman parte del grupo también (era de esperar). El montaje de la comparsa lo llevaba Willy, un comparsista de Lepe que el año anterior a ese se encargó del montaje de una comparsa de su localidad y se vino para formar parte de la comparsa.

La idea de la comparsa era "La Oveja Negra". Una alegoría de la parte más negra del carnaval, la oprimida, la libertaria, la callada, la que está presa porque no dejan que se manifieste. El disfraz se trataba de un payaso, que es un elemento carnavalesco casi histórico en los tipos de carnaval, pero se trataba de un payaso oscuro, negro, demacrado y tétrico.
Esa era la idea para el carácter musical que debía llevar a cabo. La verdad es que pueda parecer mejor o peor, las músicas que compuse, pero nadie puede llevar que estuvieran perfectamente caracterizadas con el personaje.

La cuestion empezaba a complicarse desde un primer momento, cuando comencé con la chirigota. Lo pactado con la comparsa era que la chirigota era lo primero, tanto en cuestiones de ensayo, como de actuaciones y demás.
El ensayo de la comparsa era de 9 a 10 y el de la chirigota de 10 a 12. La suerte es que la comparsa ensayaba en la Peña Mingorance y la chirigota en la Peña el choco contaminao. Ambas peñas tienen una distancia de 40 metros, como mucho.

Entre una peña y la otra, discurrieron mis meses anteriores al carnaval. Llegaron los ensayos generales y los primeros problemas porque coincidían fechas. Con la Oveja Negra nos inscribimos en Huelva, en Valverde e Isla Cristina y con Entre polvo y pico en Huelva, Valverde y Moguer.
Tuve la suerte, que los ensayos generales sí coincidieran algunos, pero las actuaciones no coincidió ninguna (toco madera para que este año 2011 sea igual).

Me gustaría contar como anécdota que en ese tiempo viajaba mucho hacia Cádiz. Había hecho amistades allí y salía muy de vez en cuando los fines de semana para irme de marcha con mis amigos de allí.
De hecho, hay músicas de la Oveja Negra inspiradas en paisajes de Cádiz (dos cuartetas del popurrit, la primera y la tercera, en modo mayor, como es normal y evidente).
Y me acuerdo que en preeliminares me tocó cantar un Domingo con La Oveja Negra y un Lunes con "Entre polvo y pico un cigarrito".
Ese mismo fin de semana, el mismo Sábado, actuaba uno de mis mejores amigos, Yoni, de Chiclana, con su chirigota, en el Falla. Hicimos el pacto de yo ir a verlo a Cádiz y él venirme a verme a Huelva con La Oveja Negra.
El Sábado me puso rumbo a Cádiz por la tarde y después de solucionar determinadas cuestiones femeninas (...) me puse rumbo al Falla a ver a mi hermano Yoni. Cuando terminó de cantar, botellón en la plaza del Falla para escuchar quien pasaba a semifinales. Decepción por que Barbate se quedó fuera y esa noche salimos de marcha. Lo que pasa es que el plan era salir por la mañana a Huelva y yo me fui al coche a las 5 de la mañana a dormir algo para estar en condiciones de coger el coche por la mañana. Lo que pasa que a las 9 estaba sin poder dormir y llamé a Yoni. Nos fuimos a Chiclana a buscar a Pepito, otro amigo nuestro más, de Chiclana a Jerez, para buscar a Selu, otro más y rumbo a Huelva.
El camino fue desastroso con esos 3, pero conseguimos llegar a Huelva jeje.
Yo no había dormido nada, y para más INRI, en vez de llegar a Huelva y acostarme, me fui con Yoni y Pepe a dar una vuelta por Huelva durante todo el medio día y despues de la tarde. A las 5 me tuve que recoger, porque a las 6 habiamos quedado en la peña Mingorance para empezar a maquillarnos. Sin dormir, resacoso y aún bajo los efectos del viaje con los tres golfos que tenía montados en mi coche, me maquillaron y actué en el teatro. Lo cierto es que no vuelvo a subirme más a un escenario en esas condiciones, pero esa noche no se notó nada en absoluto. Hay que ser responsables en esta vida carnavalesca y saber de lo que eres capaz y de lo que no y limitarte a tus capacidades y saber cuando hacer determinadas cosas y cuando no.
Pero aún así, me niego a subirme tan resacoso y falto de sueño.

Al día siguiente actuación (en mejores condiciones físicas) con los albañiles. El teatro en pié al terminar aplaudiendo "chirigota, chirigota". Lo cierto es que la chirigota gustó más de lo que nosotros pensábamos. Hasta el punto que la noche del fallo a la final, nos nombraron.

La Oveja Negra no consiguió el pase a semifinal. Era normal tratándose de una comparsa nueva con gente que nunca había salido en carnaval, autores nuevos, músico nuevo, etc. Pagamos la inexperiencia.

Sin embargo, la chirigota cantó en la final y revalidó aquel 4º premio de "Te Lo Juro", quedándo por encima de la chirigota de Fali, que el año anterior se alzó con el primer premio.

Ganamos el primer premio local, aunque el jurado que había en el concurso local, no era muy imparcial con respecto a Jesuli y Fali Ramos, y no fue tan meritorio por nuestra parte. Jesuli estaba mejor que nosotros, pero vamos que nos llevamos ña tajada económica.

No sólo esa, porque ganamos el primer premio de Moguer. Ese año fue el año que más dinero he ganado en carnavales. No miento ni soy falso si digo que yo no salgo en carnavales por el dinero, porque hay vivencias que me han marcado muchísimo más que la económica, pero joder, a nadie le amarga un dulce.

Lo que pasa es que el dinero suele traer problemas cada vez que aparece por la puerta. La chirigota tenía pensado hacer una cena con lo ganado, cosa que yo estaba de acuerdo, pero habia dos posturas diferentes:

a) La de la gran parte de la chirigota, gente con curro casi todos en tiempos sin crisis, que querían hacer una cena con todo lo ganado, sin repartir nada.

b) La mia, un estudiante sin remuneración económica, que quería una cena más discreta económicamente y llevarme algo para mi humilde bolsillo desempleado y estudiante.

Aún así, sigo pensando a día de hoy, que en los grupos se suele repartir y cada uno con su dinero hace lo que le sale del alma y entonces a raiz de eso, se hacen cenas posteriores costeadas por cada uno.

Sin embargo en la chirigota había una postura diferente, determinada por la situación económica (que hoy en día seguro que sería diferente y más parecida a la mia en aquel momento) y al final se solucionó. Yo recibí mi parte, tuve una bronca con Jesús y me quedé sin cena y sin chirigota.

Pero bueno, el paso del tiempo suele curar este tipo de heridas entre dos personas y Jesús y yo lo arreglamos, sin hablarlo siquiera, con un callado e inmombrado "corramos un tupido velo sobre esto y sigamos siendo amigos carnavaleros".

Ese día de la bronca llegué a mi casa y me conecté al messenger. Para mi sorpresa, nada más entrar vi que me estaban hablando. Se trataba de Cristobal Giraldo...

2005 - Érase un comparsista....

Al terminar carnavales, todo comenzó con la idea de crear una comparsa joven dentro de la peña de la Colombina y varios de esos jóvenes, nos pusimos manos a la obra para reunir a gente. En la peña gustó mucho esa idea de sacar dos grupos adelante, por lo que decidimos sacarla con la idea de que fuese la "comparsa de la peña de la colombina".

Lo cierto es que me estaba comiendo por dentro, puesto que, durante los 7 años que ya llevaba en carnavales, el amor hacia la modalidad de la comparsa superaba de lleno al cariño hacia la modalidad chirigotera.

Y esa inquietud la compartimos también los más jóvenes: "Pillinchi", Fran, Pablito, Juan Antonio "El Negro" y Juanan. Jesús se excluyó del proyecto puesto que tenía pensado dejar los carnavales a causa de los estudios y el 2004 sería su último año sobre las tablas. En ese proyecto también se sumó un ilusionado Miguel Garrocho, que quería sumarse al proyecto.

Yo compuse una música de pasodoble con una letra de medida, aunque Juan Antonio "el Negro" iba a ser el encargado de escribir las letras. Ese pasodoble de medida, era un pasodoble a Huelva, como era ya típico por estos lugares. Quedamos varias veces en la peña e ibamos poco a poco montándolo para los 5 ó 6 que habíamos únicamente en ese proyecto de comparsa.

Pasa, en estos campos carnavalescos, que cuando no tienes gente, tienes que replantearte muchas cosas. A veces te da por tirar la toalla, otras veces te da por seguir palante con lo más mínimo e ir buscando gente conforme pasen los meses acercándose febrero o también, cómo última opción, fusionarte con compañeros que se encuentren en tu misma situación.

Esto fue, precisamente, lo que pasó. Mi hermano Raúl, con quien saliera en el 2000 y 2002 con "Te lo Juro" y "Una chirigota segura", respectivamente, me estuvo comentando que él estaba creando un proyecto de comparsa junto con un compañero suyo del trabajo del Mercadona: Rafa González. En su grupo ya habían 6 personas, por lo que la suma de ambos grupos, daría lugar a una estructura de comparsa que se iba pareciendo realmente a lo que es, físicamente, una comparsa.

Pero la idea de fusionar tendría un gran problema. Cuando fusionas dos grupos, no sólamente estás fusionando personas, sino también ideas.
En ese choque de ideas, surgieron dos problemas: uno de ellos era replantear si la comparsa iba a salir por la peña de la Colombina o no (idea que hizo que varios de los integrantes de nuestra parte del grupo no estuvieran muy contentos) y la otra era que el hermano de Rafa González, Manolito "el púa", fuese el letrista y músico de la comparsa (idea que no simpatizaba mucho ni a Juan Antonio "El Negro", que era el letrista, ni a mi que era el música, del proyecto inicial).

Entonces como esas ideas replanteadas, se estaban implantando poco a poco en la "comparsa fusionada", toda la parte de los jóvenes de la Colombina nos marchamos (unos más tempranos que otros).

Aquel fallido proyecto de comparsa no me hizo tirar la toalla en la modalidad. Ese mismo mes comenté mi baja en la chirigota de la peña de la colombina y les expuse precisamente que mi motivo para dejarla era que quería salir en una comparsa.
Aceptaron aquella marcha y estuvo bien vista por todos.

Tras el proyecto de comparsa fallida y tras mi marcha de la chirigota, me encontraba sin grupo. Entonces me puse manos a la obra, para llamar a una persona que siempre había estado comentando su idea de sacar una comparsa y le ofrecí mi disposición por si necesitaba un guitarra. Esa persona era Fali Ramos. Fali accedió puesto que realmente estaba proyectando una comparsa y me dijo que contaba conmigo.

Desde Abril de 2004 hasta mediados de verano, mi futuro carnavalesco para el 2005, estaba en aquella comparsa de Fali. Ese verano conocí en Cádiz a un conocido comparsista y corista de Cádiz, pero casi afincado en Huelva, que es Emilio ("el picha" como le dicen por aquí). Me comentó que estaba buscando grupo para salir en Huelva y se lo ofrecí a Fali. Fali aceptó incluirlo y también entró en aquel proyecto de comparsa. Sin embargo, Fali Ramos, en aquella época, le pasaba lo contrario que a mi, que tenía más ganas de sacar una chirigota que una comparsa, y cuando se estaba acabando el verano, comunicó su decisión de no sacar la comparsa y seguir con su chirigota.

Otra vez sin grupo y entonces comencé de nuevo mi búsqueda para poder cumplir mi objetivo para aquel carnaval. Entonces llamé a una persona con la que me había disfrazado de pipa y con la que confiaba poder tener una oportunidad para conseguir salir en una comparsa. Era Raul Barneto y tuve la suerte de que aquel año Raúl cogió las riendas de la comparsa femenina de la peña Mingorance. Entonces me comentó la idea de salir con las mujeres y la vi estupenda.
Pero aquello no era todo, porque después del primer ensayo que fui de las mujeres, me pasé por la peña de la colombina y después de su ensayo, con las típicas charlas de "¿y bueno el año que viene qué?, les comenté que iba a salir con Raul Barneto en las mujeres. Me ofrecieron la posibilidad de hacer doblete y de salir en ambas.
La acepté y en aquellos días, mi futuro para el 2005 pasaba por salir de nuevo en mi chirigota de la colombina y salir con las mujeres.

Digo aquellos días, porque al final pasó lo que tuvo que pasar. Emilio, el gaditano (aunque en verdad más isleño, de la isla, que gaditano capitalino), me comentó que a Cristobal Giraldo le hacía falta un guitarra que punteara. Por lo visto, Manolito el 'púa' tuvo un fatídico problema familiar (desde aquí te mando un abrazo, Manuel) y Cristobal Giraldo se vio con la necesidad de un guitarra-púa.
No me lo pude pensar y llamé instantáneamente a las dos personas ante las que tenía que dar la cara, por aquella decisión: Raúl Barneto y Perfo, de la colombina.
Raúl me dijo que adelante, que era lógico que tomase esa decisión y que no pasaba nada, que él en mi lugar también la tomaría.
Perfo (y varios excompañeros de la peña de la Colombina, después) tuvieron una reacción más bien distinta, puesto que no les pareció bien que estuviera jugando a dos bandas y que me fuese de esa manera. Llevaban razón, para qué mentir, pero en mi caso tenía el cieo objetivo o fin de salir en una comparsa. En aquel momento se podía decir que el fin justificó mis medios, pero bueno, decisiones más difíciles he tomado y que más adelante veréis.

Me puse más a la obra para salir en aquella comparsa en la que mi hermano Diego salió en el 2000. Una comparsa que para debutar en la modalidad con ella, era un lujazo. Varios primeros premios, segundos premios, terceros, cuartos. Cristobal Giraldo tiene un palmarés de envidia y la verdad es que estaba super ilusionadísimo con el hecho de salir con él.

Era un mundo aparte a todos los sitios donde había estado ensayando (excepto cuando ensayé varios días en la comparsa de Roque) y me fascinaban todas las noches de ensayo. Era lo que estaba buscando. Ese trabajo, ese montaje, ese repertorio, ese estilo de modalidad, ese ambiente, esa gente que va a escucharte a los ensayos y no se ríe con lo que cantas sino que se emociona, esos comentarios, esa pasión, esa rivalidad con tus compañeros...
Bendita modalidad a la que acababa de llegar como adulto (porque precisamente ese año ya tenía 18 añitos para cumplir los 19 en Diciembre).

Además el tipo era una alegoría de lo andaluz, de lo mío, era un tipo muy personal que Cristobal lo bordó (en el video de la derecha del blog podeis verlo).

Cuando cantamos en preeliminares, fue una experiencia increible, lo mismo que cuando cantamos en semifinales.
Aquel año vivi además una experiencia todavía más preciosa que la que he vivido ningún año y es enamorarte de alguien por carnavales. Yo pienso que la comparsa tiene mucho que ver en ese sentido, porque el sentimiento que te desgarra en el alma y los sentidos, te abre las puertas de tus emociones en todos los contextos de tu vida.

La noche del fallo del jurado a la final fue preciosa. Y no porque dijeron EL ANDALUZ entre las finalistas (aquel año mi comparsa de la tarantela, la dejaron, injustamente pienso, fueran de la final. Me gustaba más que "El peaje"), sino porque fue el día que di mi primer beso llevando un disfraz. Puede tratarse de una tontería, pero yo no había vivido esa preciosa experiencia de besar a alguien mientras llevas un disfraz y que esa persona también lleve otro disfraz.

Precioso y la noche de la final igual. El cabroncete de mi amigo Juanan, el que salió de caja el año anterior, conmigo, en la colombina, me gritó la noche de la final antes de empezar el popurrit "Que bien toca una púa cuando está enamorada".

Lo cierto es que sí, influye mucho desde el momento en que la música es un arte, el arte es un sentimiento y el sentimiento más bonito (y horrendo) es el amor.

La comparsa quedó en 5º lugar, que a mi me sabía a gloria, aunque bajase un puesto con respecto al que conseguí con la chirigota "Te lo Juro", ya se trataba de volver a una final 5 años después y sólo con el hecho de estar en una final, me sentía conforme y agusto conmigo mismo.

Ese año también cantamos en Moguer, en Valverde y en la puebla de Guzman. El hecho de cantar con una comparsa en un sitio que no es tu tierra, también era algo fantásticamente irrepetible para mi, desde que se abre el telón, hasta que se cierra.

Gran año aquel por todo lo que significó, por el esfuerzo por conseguir una meta y por recoger los frutos de aquel esfuerzo.
El 2005 es un año escrito con letras de oro. Mi primera comparsa en adultos.

La primera comparsa en adultos que creó a una "bestia" de pasiones comparsistas que acababa de salir de su prisión.

POSTDATA: No me voy a olvidar de decirlo jeje. En mi comparsa, aparte de haber instituciones del carnaval colombino como Cristobal, Pepe Alvarado, Manolo Alvarado, Angelito, Juanjo, Fernandito, Pepe el moto, Tejada, Blasmi, Tete, Emilio, Angel Durán, Paquito la torre, Paco Alhamar (porque uno por uno, son todos instituciones del carnaval colombino), conocí aquel año a mi Amigo y casi hermano IVÁN.

Sobran las palabras y los sentimientos.

2004 - "Reventaos por un francés"

Guardaba las sábanas de aquellos fantasmas para disponerme a seguir en la misma chirigota de la misma peña otro añito más. Tanto yo, como Jesús continuamos en aquel grupo que tanto nos hizo disfrutar durante ese año 2003.

El grupo continuaba siendo el mismo, salvo dos bajas y dos incorporaciones. Andrés abdullah y Roque dejaron la chirigota y en sus vacantes, entraron Roca, que volvía a la chirigota y Juan Antonio "El Negro", que pasaría a tocar el bombo, haciendo que Fran, hermano de Diego, pasase a cantar.

El año anterior estuvimos ensayando en la histórica Peña Carnavalesca de La Colombina que estaba situada en la calle Blanca Paloma en el barrio de Viaplana de la capital onubense. Era unas casitas bajas, como decimos por aquí, que iban a demoler, por lo que la peña se vio obligada a buscar una nueva ubicacion.

Mientras la buscábamos, se acercaba Mayo y Junio y tratamos de quedar para empezar a montar el pasodoble del año siguiente. Fali Ramos nos compuso una música de pasodoble bellísima por lo que nos pusimos manos a la obra para empezar a cogerle el gusto y el paladar al mismo.

Como no encontrábamos local, decidimos ensayar durante aquellos meses en la calle. Sí, lo habéis leido bien: en la calle. En aquel momento estaba en obras toda la prolongación de la Avenida Andalucía y a la altura de la gasolinera, en los jardines de enfrente, encontramos unos bancos donde dejar litronas y sentarnos y darle voces a un pasodoble cuya letra de medida era un piropo a la ciudad.

Era realmente precioso, porque contando con que para mi, la zona de la nueva avenida andalucía, universidad, saladillo, es la parte que más me gusta de toda mi ciudad; contar con la experiencia de cantar a huelva "cara a cara", en sus calles, no tenía precio.

Pero claro, en Mayo y principios de Septiembre, allí estábamos en la gloria. Una vez comenzase a llegar el frío, nos ibamos a acordar de el "embrujo de cantar en las calles de tu ciudad". Por lo tanto, la búsqueda finalizó con un local la mar de 'apañao' en la calle San Ramón.

Entonces, los meses de Septiembre y Octubre consistieron en ensayar varias veces a la semana por la noche y quedar los sábados para que entre toda la chirigota hiciesemos la mudanza y el asentamiento en aquella nueva peña.

Fontanería, Albañilería, labores que en mi vida, ni en la anterior, seguramente hiciera, así que es de imaginar lo mal que lo pasé en aquel ambiente tan desconocido para un humilde estudiante de 1º de Filología Inglesa (humilde y vago).

Por cierto, Fali nos comentó que la idea de la chirigota era salir de los chinos que van llevando carros de estos que se cogen por dos brazos y los llevan por la muralla china, pero nosotros lo seriamos como chinos llevando a franceses turistas por Huelva. De ahí que el nombre definitivo de la chirigota fuese "Reventaos por un Francés".

Se iban aproximando las fechas venideras a los carnavales y la chirigota avanzaba con cuartetas de popurrit con músicas de aquel entonces ("ratoncitos coloraos" de andy y lucas) y no de aquel entonces ("el vino en un barco" , por ejemplo). Presentación simpática y cuplets que hacían reir a los que nos visitaban los ensayos.

La verdad es que la chirigota sonaba mejor que el año anterior y eso fue de agradecer para el público que ese año nos volvió a acoger como siempre acoge a esta chirigota.

Pasamos a semifinales y volvimos a hacer un paso por el concurso muy digno. La chirigota ya no se colaba en la final como antaño, pero ahí seguía dando guerra y al pié del cañón, al igual que sigue hoy por hoy. Este año 2011, precisamente, cumple 25 añitos, así que no nos queda más remedio que decirles OLE. Porque detrás de todo lo que mancha al carnaval, está la afición y la constancia por esta fiesta. Sinceramente, sigo pensando que Volando voy (2008) era una chirigota de final y que se cometió una injusticia, pero tarde o temprano el carnaval y Huelva, volverá a premiar a esta chirigota como se merece.

En definitiva estos dos años, 2003 y 2004, he aprendido, disfrutado y reido muchísimo y me faltan las palabras para agradecerles lo que me ofrecieron y me dieron, sin que yo se lo pidiese. Gracias compañeros. Muchas gracias.

Pasa también, que hay quien nace para ser policía, quien nace para jugar al badmintón, quien nace para tener como hobbie el parchís, etc.
Yo nací para ser comparsista. No es más que una inquietud y una 'vocación' personal, a nivel carnavalesco, que iba a forzar mi marcha de aquella peña y causaría malestar en muchos de sus componentes, pero tal y como explicaré, en el próximo capítulo, se trataba de algo inevitable por naturaleza. Por naturaleza de mi mismo.

Al terminar carnavales, todo comenzó con la idea de crear una comparsa joven dentro de la peña de la Colombina y....

2003 - Un carnaval "colombino" y diferente

Después de vigilar el teatro como segurata, colarnos en semifinales y disfrazarme de pipa, se me venía encima la duda sobre qué haría para el venidero carnaval 2003.
La primera decisión que tomé fue la de abandonar la peña de los peques. No es porque estuviera mal allí, ni muchísimo menos, pero pensaba que había cumplido ya un ciclo en aquella peña. La verdad es que fue la que me abrió las puertas al carnaval y no tengo más remedio que agradecerle todas esas oportunidades en todos esos primeros años, tanto a Antonio el Gitano, como a Raúl Barneto, como a Angelita, mi Tia Feli, la gente de la peña, todos mis compañeros/as, etc.

En definitiva, al dejar la peña de los peques, tenía que pensar en cual iba a ser mi futuro en la modalidad de adultos, donde ya había entrado y de la que no quería irme, ni muchísimo menos dejar de salir. La chirigota de la cabra no iba a salir para el próximo año puesto que Jesús se fue a vivir a Punta Umbría y por razones lógicas, saco su chirigota allí.

En Marzo del 2003 surgió una idea de chirigota que estaba dirigida por Raúl Barneto y por Oscar Daza, que el año anterior salió de guitarra con Los sobrinos del Tito Paco. En el grupo iba practicamente casi la misma gente que salió al año siguiente con "Los divinos del 3x4", junto a mis dos hermanos, ya que teniamos la idea de querer salir los tres hermanos juntos en la misma agrupación.

Sin embargo, los ensayos y el ambiente no nos convencía del todo a ninguno de los tres. No es que sea mejor ni peor, sino que en aquel momento, estabamos acostumbrado a otro tipo de ambiente. Al final decidimos dejar la chirigota.

Desde aquel momento hasta casi finales de verano, estuve sin grupo. Algo inimaginable hoy en dia para mi y no porque ahora tenga la fortuna y/o posibilidad de salir en diferentes tipos de grupos, sino porque hoy en día, no aguantaría 6 meses sin saber sobre mi futuro carnavalero o sin saber en qué grupo estoy y empezar a dedicar tiempo al mismo. Antes saco yo un romancero sólo jejejeje.

Y fue hasta finales de verano porque había una chirigota, que conocía desde que empecé en esto, que necesitaba dos guitarras. La fortuna no sólo me sonrrió a mi, sino a mi mejor amigo de aquel entonces Jesús. Nos pasábamos casi todo el día en mi casa o en la suya jugando a la play, cantando carnavales, etc. Cuando se echó novia, se dispersó poco a poco nuestra amistad por dejadez de ambos y no por malestares ni malos rollos, pero eso creo que le ha pasado a todo el mundo que está leyendo esto, ¿verdad?

En definitiva, la chirigota nos llamó a mi y a mi amigo Jesús para salir ambos de guitarra. Se trataba de la chirigota de la peña de la colombina. Digo chirigota porque en realidad es el nombre que recibe la modalidad en la que ha derivado la antigua modalidad de la "murga", diferente a la chirigota en cuestiones estructurales y estilistas.

La idea para salir era la de fantasmas. Unos fantasmas con muy poca verguenza. Ni opaco ni ofrancisco sino transparente.
La verdad es que estos fantasmas sólo tenían de fantasma el tipo y el nombre, porque la gente de la Colombina nos demostró ser gente de una legalidad exquisita.
Nos sentiamos como uno más, algo que no había experimentado en mis anteriores grupos de adulto, aunque tuviera ya los 17 años y los 15 jesús, eramos unos chiquillos aún, pero teniamos la misma voz y el mismo voto que el resto de componentes, incluso que los viejos.
Así es normal que uno se sintiese involucrado y pagase gustosamente una cuota de socio de una peña que vivía el carnaval de una forma increible.

La actuación en preeliminares y semifinales fue genial puesto que en preeliminares sufrimos un percance cuando pablo tenía que hacer que volaba en el popurrit enganchado a un arnés y levantado sobre el suelo. La cuestión es que los tramoyistas no lo bajaron y se llevó todo el popurrit colgado. Tuvimos la suerte que estabamos en casa y la gente se descojonó con el incidente. Ese mismo año también subimos a cantar con un Pillín escayolado por un accidente laboral. La cuestión era tener percances, pero a pesar de eso nos subimos a las tablas e hicimos un papel muy digno en el concurso.

Ese mismo año fue la primera vez que grabé un CD. La grabación fue una tortura de 12 horas metidas en un estudio entre repeticiones por risas, por fallos, para montar encima, para que Roque hiciera los altos sólo, etc.

La verdad es que lo pasamos genial. Ese año acabé el carnaval sabiendo que quería continuar en aquel grupo de personas. Todos gente que me aportaron y me enseñaron muchísimo: Perfo, Pillín, Pablo, Diego, Roca (que ese año no salió pero estuvo con nosotros), Pillinchi, Pablito, Roque, Japo, Andrés, Juanan, Fran, Andres abdullah y por supuesto mi amigo Jesús.

¡Gracias a todos!

2002 - Una chirigota segura. Un juanfran inseguro

Cuando terminó el carnaval 2001, estaba bastante difuso el destino que deparaba a aquel año y carnaval venidero. Lo único que estaba claro es que el grupo de "Perlita de Juerga" se disolvía y cada uno tiró por su lado. Recuerdo que en un ensayo de "Perlita de Juerga" fueron a verlo varios componentes de la chirigota que ese año descansó de la Peña La Cabra Ajorká, donde salía aquel año anterior de 2000, con la que rocé la gloria. En ese ensayo, comentaron la idea de volver y de sacar un tipo y una idea muy buena y simpática para una chirigota.

Mi hermano Raúl, al terminar fcarnavales, se agarró a esta idea de volver a la chirigota. Sin embargo, mi hermano Diego había encontrado un grupo de ex chirigoteros de la chirigota de la peña Los Ventaneros que querían saca una chirigota desafiante y mordaz, en especial sentido, hacia la ex chirigota a la que todos pertenecían. De este modo le denominaron "Peña el grupito".

Ambos hermanos estuvieron tirando de cada brazo para que me fuera con uno de ellos. A mi me gustaban ambas ideas y en un principio le di la palabra a mi hermano Raúl para volver a la chirigota. Sin embargo, por otro lado también me gustaba la idea de la chirigota de mi hermano Diego. Al final me decanté por ésta y comenzamos a ensayar desde Abril.

La chirigota tenía un pasodoble bonito y una idea muy buena, sin embargo, los ensayos no convencían del todo y se trataba de un ambiente muy diferente a los dos en los que había estado los años anteriores.
La chirigota se disolvió en teoría, aunque en la práctica, Miguel Garrocho, trató de aprovechar lo que había montado y tirar palante buscando gente nueva y llevando palante aquel proyecto de "peña el grupito", que nada tiene que ver con su filosofía de un primer momento. Esa peña se creó para atacar, realmente, a una chirigota, y cuando Migue la rescató, le suprimió cualquier tipo de naturaleza de tales características y de paso, sumó una peña más para nuestra fiesta. Desde aquí mi enhorabuena a Miguel Garrocho por lo que aporta, verdaderamente, a esta fiesta. Tenemos que valorar más a gente así, la verdad.

Un día, mi hermano Diego, vino a casa comentando la idea de que tanto él como yo teníamos la posibilidad de salir en la comparsa de la Peña La Máscara. La idea de salir en una comparsa de adultos, evidentemente, atría a aquel comparsista disfrazado de chirigotero con miras de alcanzar la madurez.
Fuimos a ensayar, varias semanas y al final mi hermano Diego decidió dejar la comparsa, colgar el pito durante un buen tiempo y dejar los carnavales.

En ese momento no me veía preparado para estar en un grupo sin la mano de cualquier a de mis hermanos, lo reconozco, por lo que hablé con mi hermano Raúl y acabé entrando en la chirigota. En la chirigota estaban casi los mismos de aquel 2000, excepto las incorporaciones de Manteka, Mundi y Jose Mari, el hermano de Neme.

La chirigota tenía como idea salir de seguratas de la puerta del teatro y llamarse "Una chirigota segura". Recuerdo que durante el mes de Noviembre actuamos en un Festival de Carnaval en Villanueva de los Castillejos junto a la chirigota del Lobe y el Sherriff (Festival de Cannes y Los Mosqueteos). Esa experiencia de cantar en un salón para tanta gente me hizo disfrutar lo inimaginable. Además se trataba de un público de un pueblo que no conocía en aquel momento y era una delicia disfrutar disfrutando para gente que le gusta el carnaval, sea de donde sea.

Por otro lado, ese año también iba a salir en la Peña de Los Peques y en este caso sería para hacerlo por "penúltima" vez como se suele decir. Se veía de lejos que, aunque no quisiera dejarlo en el momento que me acoplé al carnaval de los adultos, si era previsible que en cuestión de varios años, lo hiciera. Ese año fue. Era una chirigota e íbamos de pipas y nos llamábamos "Tras la Cáscara". Genial idea y tipo para guardarlo en un baul de los recuerdos de color amarillo (creo que es el color del contenedor donde se tira el foame).
La dirección de la peña cambió de riendas, puesto que ese año la dejó Antonio "el Gitano" (¡cuanto te agradezco lo que me has dado Antonio!) y la cogió Raúl Barneto, al que ya comencé a conocer aquel año, en el que ya estaba naciendo aquel baluarte del carnaval como lo es actualmemte. ¡Un abrazo Raúl y recupérate!

Con "Una chirigota segura" y "Tras la Cáscara" me lancé hacia el carnaval 2002. Con "Tras la Cáscara" fuimos a cantar a la muestra infantil e hicimos un viaje a Cádiz con la peña para ver el ensayo de "En Propia Mano", la comparsa de Joaquín Quiñones. Creo que aquella vez fue la primera vez que visité Cádiz capital durante toda mi vida. De hecho, me marcó bastante.

Y con la otra chirigota, actuamos en Huelva y Punta Umbría. En Huelva conseguimos pasar a semifinales (eliminando el trauma del año anterior). Sin embargo, no corrió la misma suerte que tuviera "Te lo Juro" aquel año 2000, pero las semifinales supieron a gloria después de lo que pasó el año anterior.

En ese momento me dí cuenta, que a veces lo poco, puede llegar a saber a mucho, depende simplemente de la predisposición de tu paladar.

Y es que en carnavales hay que estar acostumbrado a todo. A ganar, a perder..... Ya lo decía el año pasado con "Los de la tierra Santa":

"Las guerras que aquí se proponen son coplas de los carnavales. Esas las quiero para mi, no me importa las pierda, las empate o las gane".

2001 - Del cielo al infierno, sólo un paso....

Cuando en el disfraz de la chirigota "Te lo Juro", le pegamos a mi disfraz las pegatinas con las letras con la inscripción: NOVATO, y una "L" de autoescuela, queramos mostrar cómica y verazmente una realidad de un niño que estaba metiéndose en un mundo de adultos peliagudo para él, del que sólo conocía la gloria.

Cuando terminó los carnavales del 2000, mi intención era seguir en los peques otro añito más y seguir en aquella chirigota otro añito más. Lo primero porque no quería dejar ni a mis compañer@s de los últimos 3 años atrás y porque no estaba bonito que tras haber alcanzado la gloria, me quitase y me olvidase de quien me ha dado de comer, al menos al año siguiente. Lo segundo porque mi chirigota me había hecho vivir momentos inolvidables y repetir era lo primero que se le antoja a cualquiera después de vivir la gloria junto con alguien.

Sin embargo, Jesús "el de la cabra" creo recordar que junto al éxito carnavalesco, vivió un momento laboral expléndido, puesto que le habían ascendido en su empleo. Este hecho dificultó que al año siguiente pudiese sacar la chirigota y al final, se decidió descansar puesto que también queriamos abstenernos de sacar algo que no estuviera a la misma altura que Te lo Juro.

Fue entonces cuando mis dos hermanos, se pusieron manos a la obra en hacer la soñada por ellos, chirigota de los amigos. Todos sus amigos de botellón de pequeños (que cantaban o tocaban bien) los reunió en un mismo grupo. Luis Perez, Emilio, David Santos, mi primo Ramón y un jovencísimo Pepito Ferrer. Se unieron gente de la chirigota que en el año anterior fue "paranoyix" y algunos familiares de componentes.

La letra nos la hacía Emilio Gutiérrez y la música del pasodoble y los cuplets fueron de Fali Ramos. La chirigota tenía un tipo de folklórica con "bata de cola", es decir, una bata de guatiné con una cola. Nos llamábamos "Perlita de Juerga".

Ese mismo año tenía claro que no iba a dejar de lado a la peña de los peques y seguí en la comparsa que ya por entonces estaba transformándose en juvenil. En la comparsa, entró una segunda generación de comparsistas femeninas que se unieron a Marina, Vane, Cristina, etc. que ya llevaban varios años en la comparsa.
La comparsa se iba a llamar "La Mujer de Rojo" y pretendíamos representar la figura de Marilyn Monroe. Eso sí, ellas iban disfrazadas con un vestido semejante al de la famosa foto con la falda en vuelo de la modelo y actriz estadounidense, mientras que los hombres ibamos trajeados con corbata.

Pero no todo acababa aquí. Ese año Antonio estaba sólo con la guitarra en la chirigota y me pidió el favor de echarle el cable y salir con él ayudándole para que al menos hubiera dos guitarras. Lo cierto es que aquella decisión provocó que aquel año hiciera, nada menos, que un triplete. En la chirigota seguía mi prima Belen, Rosita, Juan Antonio, Julio, etc.

Lo cierto es que ese triplete se trataba de una locura que estaba sacando lo más loco de un loco recien sacado del horno.

Ese mismo año actué con la chirigota y la comparsa de los peques, fuera de concurso, pero en días normales de teatro.

De la actuación de Perlita de Juerga en preeliminares, tengo muy buenos recuerdos. Me acuerdo que gustó mucho la cosa, la gente se rió mucho, sobre todo con el popurrit y se conectó con el público.
Al salir, nos felicitó casi todo el mundo y nos ponía, en sus valoraciones personales, de la final para arriba (la gente es muy exagerada).

La noche de los cuchillos largos, la escuchamos toda la chirigota, con gente de muchos grupos de la capital, en la carpa del patio, donde estaba la radio puesta a todo volumen y entre todos escuchábamos quien pasaba y quien no.

La sorpresa nos llegó cuando entre las semifinalistas no estaba Perlita de Juerga. Un mazazo grande para un niño. Un niño al que le habían quitado su caramelo y de forma temprana y rápida. De un año para otro. Del infierno a la gloria.
Pero bendito caramelo robado, porque aquella experiencia me sirvió para hacerme un click que me sirviera para darme cuenta que en carnavales puedes estar muy bien, bien, mal o muy mal y puedes quedar muy bien, bien, mal o muy mal. Una cosa dependiente o independiente de la otra.

Lo cierto es que aquel año lo pasé de escándalo y me dí cuenta que disfrutar tampoco tenía que estar necesariamente reñido con la clasificación en el concurso.
Y digo esto, porque ese año viví una experiencia inolvidable por lo bien que me lo pasé aquella noche. Perlita de Juerga actuó en las preeliminares del concurso del carnaval de la luz, en la Peña Flamenca de Punta Umbría, donde antes se celebraba el concurso del carnaval puntaumbrieño. Aquella noche cantábamos los últimos y eso propició que entre tanto cubata y cerveza, estuviera TODA la chirigota, menos un ingénuo servidor, en condiciones etílicas desfavorables para una actuación de carnaval, pero eso era lo de menos porque la liamos bien liada en el escenario. Hasta tal punto que el biruto, el bombo, se puso a contar chistes despues de los cuplets EN UN CONCURSO !!!. Lo cierto es ke el público también se rió bastante con aquello y tampoco dimos ningún espectáculo lamentable.
Ahora si se emborracha toda la chirigota no pasa nada, pero como se emborrache sólo uno de los componentes, lo pasas mal je, je.

En definitiva que aquel fue un gran año que me hizo experimentar como en el carnaval puedes pasar del cielo al infierno en un sólo paso (en un sólo año).

Las miras para el año siguiente no estaban muy claras del todo. Habían varias opciones de por medio y lo más polémico del asunto, es que en cada una de las opciones, estaba un hermano distinto. Raúl en una y Diego en la otra.

2000 - Un catorceañero adulto en una final....

Siendo Septiembre de 1999, comenzando 4º de la ESO en el colegio de la hispanidad y teniendo mis miras en carnavales puestas en seguir otro añito más en la Peña de Los Peques, jamás pude imaginarme la que iba a caerme en los carnavales de aquel memorabilísimo año.

Como dije, ese año, simplemente iba a salir en la comparsa de Los Peques, otro añito más. Antonio "el gitano" nos mostró en Septiembre que la idea para el próximo carnaval era la de ir de bailadores de tango argentino y que nos llamaríamos "Paso a paso". El disfraz no iba a ser muy complicado puesto que bastaba con unas prendas con elegancia que cumpliesen la función de vestir a unos bailadores de la música rioplatense. Sin embargo, la idea sí requería de una puesta escena muy particular que implicaba que las integrantes de la comparsa, que no fueran instrumentos, aprendiesen a bailar tangos. La AAVV se encargó de traernos una profesora de baile que dedicaba una hora a la semana, de los ensayos, a ensayar a bailar tango a cada una delas respectivas voces de la comparsa.

Sin embargo, llegó el momento. Era impredecible e inesperado. Todo comenzó una tarde de Octubre, en la que estabamos en mi casa, yo y mi hermano Raúl. Mi hermano Raúl iba a salir en la chirigota de la peña La Cabra Ajorká. Una chirigota de adultos que participaba en el concurso del Carnaval Colombino y que en los últimos años había estado en las semifinales del concurso onubense.
Aquella tarde, yo me encontraba haciendo la tarea del colegio, mi hermano Raúl estaba con la guitarra practicando los acordes de su chirigota. Me pidió que sacara la mia y que le ayudara a buscar algunos acordes.
Sin embargo, inevitablemente, esa búsqueda de acordes dio lugar a tocar de forma improvisada y expontánea, algunos punteos que surgieron en el momento.
Mi hermano Raúl me miró y me dijo: ¿Te vienes esta noche al ensayo?
En ese momento me quedé sin palabra y le contesté afirmativamente.
Yo pensaba que mi asistencia al ensayo era simplemente para ver la chirigota de mi hermano, cosa que hice puesto que vi su ensayo completo. Sin embargo, delante de toda la chirigota, al terminar el ensayo, mi hermano Raúl me cedió la guitarra de Jesús, el de la cabra y me dijo: "como lo hicimos esta tarde, vamos a tocar el pasodoble".
En ese momento, ni los nervios pudieron con la sed de expontaneidad y de expresión de primitivas sensaciones musicales carnavaleras que estaba deseando de exteriorizar.
Cuando terminamos de tocar el pasodoble, Jesús le dijo a mi hermano: "Traételo para la chirigota, ya!".
La vuelta de ese ensayo hasta mi casa (que se encontraba en la AAVV de La Hispanidad, además) consistió en una innecesaria convicción de mi hermano hacia mi para que entrase en la chriigota. Innecesaria, porque desde que toqué el pasodoble esa tarde en mi casa, estaba deseando entrar.

Iba a realizar un doblete, pero en este caso de mi comparsa infantil y de una chirigota de adultos. En el momento de la decisión, siquiera había cumplido los 13 años, pero era una decisión que sabía que me iba a marcar de por vida.

Me acuerdo que "Paso a Paso" actuó el mismo día que "Te lo Juro" (nombre de la chirigota), sin embargo actuó el mismo día, por la mañana y en la sesiónd e noche, respectivamente, porque con la comparsa de Los Peques actué en la muestra infantil de por la mañana y esa misma noche actué con "Te lo Juro" en la sesión de preeliminares del Concurso del Carnaval Colombino.

En los ensayos de "Te lo Juro" empezaba a respirar nuevas experiencias: un trabajo más elaborado, el disfraz, un grupo de gente mayor que yo con la que compartía noche tras noche, risas, lágrimas, sudor, esfuerzo y ensayos generales en los que tenía el centro de las miras por mi corta edad.
Me acuerdo de un ensayo general que hicimos con la chirigota "Proyecto X" donde salía un vecino de mi calle donde veraneaba en Punta Umbría, Diego Sousa. Aparte de desconocidos en aquel entonces, para mi, como Nacho Tinoco y mi actual compañero de comparsa, Auri de la Villa.
El ensayo general que hicimos en la antigua salamanquesa de Punta Umbria, fue también digno de recordar, puesto que se trataban de experiencias nuevas, cantar por la noche, cantar frente a un público que pretendía reirse contigo, con tu grupo de gente adulta. Era un universo aparte.

Cuando cantamos en preeliminares, no tenía palabras, igual que en semifinales. Eran momentos imposibles de olvidar para aquel niño de cuatorce años recien cumplidos en el pasado Diciembre.

Pero el momento más mágico lo viví cuando dieron el fallo del jurado para la final. No esperaba que pasásemos. Además, nos había penalizado por haber cantado un pasodoble a la comparsa de los primos utilizando el principio de la música de pasodoble de El Orfanato (regla absurda para esa clase de circunstancias).

Sin embargo, lo oí. Lo sentí. Lo probé. Lo respiré. Esa sensación que entra por el cuerpo cuando dicen tu nombre, el nombre de tu grupo, de tus ensayos, de tus noches de sufrimiento y esfuerzo. Comencé a dar saltos de alegría, sólo en aquel palco. Bajaba las escaleras con la mejor cara de felicidad que podía haber tenido nunca con aquella edad y salí del teatro para encontrarme con mi hermano Raúl, con Juanma, con Jesús y con Pedro. Rompí a llorar. Es la única vez que he llorado en carnavales. Fue precioso ver a un niño de 14 años llorando desconsoladamente por una alegría. Sin palabras.

La final de aquel año fue subirse a un escenario para disfrutar sin importar lo que nos diesen, cosa que así fue. En aquel momento, era la gloria el simple hecho de estar en aquella final. Se sabe siempre que la ambición y la humildad son dos gigantes en lucha constante y aquel año la humildad sin ambiciones, ganaba por goleada en aquella noche en la que por el simple hecho de estar en una final, me sentía premiado. Aunque actualmente sigo dando saltos de alegría por pasar a una final, ya no es lo mismo que aquella, que fue la primera de todas. Uno de los mejores momentos carnavaleros de mi vida ( si no el mejor).

Aquel carnaval era ir por diferentes concursos y disfrutar hicieramos lo que hicieramos. Fue un carnaval inolvidable y me adentró de lleno en un carnaval de adultos de forma prematura. Esto tenía sus pros y sus contras, pero hasta el momento estaban dándose las mejores caras de aquella situación.

Lo dicho, un catorceañero adulto o un adulto catorceañero que se había metido en la boca del lobo para siempre.

¡Bendita boca del lobo !

1999 - El Carnaval comenzó a darme alas

No sabría calcular la de veces que escuché las cintas de los piratas, los juancojones, almonteño, juegos de guerra, los miserables y muchas más, pero ya que me había metido en el carnaval, no paraba de asimilarlo de forma auditiva cada vez más.
Mientras pasaba el resto del año, tenía que intentar quitarme el mono que ya sufría por aquel entonces, de alguna forma. Cuando llegó septiembre y accedí a realizar 3º de la ESO, tuve que limitar el carnaval por los estudios. Limitar el carnaval era salir sólamente en uno de los dos grupos de los peques, en vez de salir en los dos.
Indudablemente me decanté por la comparsa. Seguía casi la misma gente, a excepción de varias incorporaciones, pero la base de "niños del pasado" era casi la misma.
Los ensayos eran también en aquella mítica sala de la asociación de vecinos de la Hispanidad. Recuerdo que el local de ensayo estaba situado donde actualmente se encuentra Hispanidad Radio. Había que subir unas escaleras que terminaba en un hall con tres salas diferentes. Un pasillo con dos servicios de chicos y chicas, respectivamente (el de chicas, es donde se encuentra ahora mismo HR), otra sala y la sala donde ensayábamos. En esa sala se respiraba el aroma a aula de colegio que nos hacía sentir en una clase donde aprendiamos sobre el carnaval.
Antonio seguía confiando en mi faceta musical como guitarra y volvió a cederme ese puesto en la comparsa. El que sí que me quitó fue el de contralto, puesto que el año anterior era el que realizaba en los finales de los pasodobles, aunque cualquier persona que escuchase "niños del pasado" se daría cuenta que al final del pasodoble sólo se escuchaba el tenor y dos de las octavillas subiendo. Ni sonaba y si lo escuchaba alguien de la comparsa que estuviera al lado mia, se daría cuenta de que estaba fuera de tono con total seguridad.
Sin embargo, perder esa responsabilidad no fue lo único que Antonio decidió conmigo para el Carnaval 1999. Me enseñó un objeto con forma triangular, de plástico y me dijo que eso era una púa. Me dijo que con eso tocaban muchos guitarristas antes de comenzar los pasodobles y que se tocaba en las dos primeras cuerdas. Ciertamente, la técnica de la púa ha evolucionado desde aquel entonces, pero quitando Cossío, Tato y a veces Pacoli, y aquí en Huelva, David er Loco, el resto de punteaos/púas de Cádiz y Huelva punteaban usando sólo esas dos cuerdas.
Me enseñó varios acordes posicionados en esas dos cuerdas y me dijo que tenía que buscar la forma de crear una melodía de respuesta a través de acordes en esas dos cuerdas que sonaran como la melodía que se estaba cantando.
Ese año los punteos no superaban 5 acordes y eran de los más simple que puede haber, pero era una genial idea la de desarrollar esa técnica puesto que Antonio me dijo que un púa solía ser una de las personas que más destacaba en una comparsa. No le faltaba, ni mucho menos, razón.

Cuando se aproximó el día en que Alas de Carnaval, actuaba en el Gran Teatro, los nervios volvían a pasearse por todo el cuerpo. El disfraz era de mariposa: las niñás tenían un vestido de colores brillantes rojo, verde y amarillo, una peluca de brillo verde y alas. La instrumentación masculina iba sin alas y con una camiseta con los colores del vestido femenino con un pantalón plateado.
Ese año no canté lo mismo que el año anterior pero fue un año más para la experiencia. El segundo año, el año de la repeticón. Ese año escuché todo el concurso de Huelva y vi las dos finales de Huelva y Cádiz, que ese año fueron el mismo viernes.

Cuando terminó carnavales seguía viendo cintas y más cintas y más cintas. Mi sueño de ser un comparsista de una comparsa como las de la tele iba creciendo más y más y más. No era como las de la tele (de las punteras de Cádiz y Huelva), pero pronto iba a ver cumplido un acercamiento a ese sueño. Pronto, bastante pronto.