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viernes, 22 de abril de 2011

Mis nuevos compañeros

Salas (caja, alto)
Santi (bombo)

Monclova (guitarra)
Juanfran (guitarra)
Nacho Vinagre (guitarra)

Vito (segunda)
Jabo (segunda)
Ramón (segunda)

Nandi (tenor)
Fino (tenor)
Fran Sosa (tenor)

Matu (tenor,alto)
Cristobal (tenor,alto)
Elías (tenor,alto)
Juanan (tenor,alto)
Fernandito (tenor, contralto)

Ya falta menos !! Estoyy deseando empezar yaaa !!

viernes, 15 de abril de 2011

2009 - 1ª parte - La decisión de irme a Punta Umbría

Cuando el Carnaval 2008 se estaba esfumando de nuestras manos, ya comencé a replantearme qué hacer para el siguiente carnaval. Es la tónica de todos los años, puesto que instantes antes de terminar un carnaval, ya estoi pensando en qué hacer para el carnaval que viene. No puedo evitarlo, es una fuerza que hay dentro de mi que sale sola causada por el fuerte lugar que el carnaval ocupa en mi vida. Es como si no tener claro qué hacer en mi vida carnavalera, me dejase sin aliento y sumido en la más incómoda de las incertidumbres.
Eso también sucedía al terminar aquel Febrero del 2008. Mi intención desde un primer momento, era saber qué iba a pasar con la comparsa de Cristobal y sobre todo con mis amigos alli presentes. Me interesé por las intenciones venideras de cada uno de ellos.
Sanchez no sabía que iba a hacer. Ivan seguiría con el padre hiciese lo que hiciese. Mientras que, Kiko y Pepito Ferrer, se traían algo entre manos.

Me interesé por qué era realmente lo que se traían entre manos y tuve una charla con ambos para ver qué iban a hacer. En aquel momento, estaba surgiendo la idea de una vuelta de Manolo Cordero y Manolo Fernandez; idea que ya había surgido muchas veces a la luz y que siempre se había quedado en el tintero, desde que dejasen de salir allá por el año 2000.
Sin embargo, ya tenía practicamente a casi toda la gente. La mayoría eran excomponentes de sus antiguas comparsas: Aurelio Poyatos, Enrique Castellano, Jeromo, Antonio Quiñones, Manolo Cordero, etc.
A esos componentes se sumarían los hermanos Ferrer (David y Pepe) y Kiko.
Me comentaron la idea y la vi bastante interesante desde un primer momento, por lo que me embarqué con ellos en aquel proyecto de regreso al carnaval de "Los Manolos".

Tuvimos las primeras reuniones, en casa de Antonio Quiñones y tras las mismas, comenzaron los primeros ensayos. La idea que había en mente era "Dimes y Diretes", una alegoría a los rumores carnavaleros y al correveidilismo de la fiesta. Manolo Cordero tenía el pasodoble y estuvimos ensayando tres o cuatro letras que ya estaban escritas por Manolo Fernandez, que tenía la tinta de su pluma a punto de estallar después de tanto tiempo esperando para volver.

La verdad es que aquel proyecto se veía continuar y la cosa iba palante como una locomotora en funcionamiento.
Llegó el verano y la comparsa decidió descansar y retomar los ensayos para finales de Agosto y/o principios de Septiembre.
El verano fue un verano donde conoci más a fondo a gente como Kiko, Ivan, Angel, Rosa Laura, Laurita y mucha gente de este mundillo que nos reuniamos para compartir ratitos de carnaval juntos. Además que coincidió con que en aquella primavera había terminado en mi vida, una relación amorosa de varios años, y necesitaba ese cambio y esa actividad en mi vida. Ya todo parecía que estaba clarísimo y que mi futuro de aquel carnaval descansaba en aquella comparsa.

Sin embargo, la vida da muchas vueltas. Demasiadas, diría yo.

Una noche de verano, Sábado, se celebraba en Punta Umbría, la Feria de Punta Umbría. Era un sábado de feria. Mediados de Agosto. Estaba Punta Umbría hasta las trancas.
En el momento en que Ángel y yo, salimos de mi casa, era la persona con las ideas más claras de todo el planeta.

Nos fuimos para la feria y comenzamos a dar vueltas por el recinto (lo típico que se hace en esas situaciones, cuando sales sin dinero, simplemente a ver el ambiente).
En una de esas vueltas, coincidimos en una de las casetas con Carmelo Cazorla.
Les transcribo lo que recuerdo de la conversación:

Carmelo: Que pasa Juanfran
Juanfran: Aqui estamos Carmelo, para echar un ratito por la Feria de Punta Umbría, jeje.
Carmelo: Hombre, que mejor sitio que Punta Umbría para venir hoy ehh jeje.
Juanfran: Y que lo digas, Carmelo!
Carmelo: Yo sé que a ti te gusta mucho Punta Umbría ehh jejeje
Juanfran: Pues sí, la verdad, desde siempre.
Carmelo: (directo y al grano). Pues en mi comparsa nos hace falta un púa. Francis está buscando un púa. Así que ya sabes....
Juanfran: Ajú Carmelo, no me digas lo que acabas de decirme por favor. Yo ya estoy comprometido y me da mucho coraje porque me he llevado detrás vuestra varios años y ahora que estoy ya comprometido en una comparsa, es cuando me ofreceis entrar no?
Carmelo: Bueno,¿tú donde sales?
Juanfran: Con la comparsa de Manolo Cordero y Manolo Fernández, allí en Huelva. Este año vuelven a salir.
Carmelo: Ah vale, pues ya sabes que te vaya bien y si te arrepientes, te vienes con nosotros jajaja.
Juanfran: Jaja vale Carmelo jeje. Que coraje en verdad, pero bueno..jeje.

Tras la conversación, estuvimos un tiempo por la Feria y no paraba de pensar, durante toda la noche, en aquello que había tenido lugar en aquel momento.
Yo le decía a Ángel: Pufff, acaba de dejarme completamente trastocado, porque no me lo esperaba. Llevo ya demasiado tiempo detrás de ellos y ahora que no "puedo" salir con ellos, es cuando me llaman. Que coraje tio!
Fuimos a comprar churros y nos fuimos de alli. Realmente necesitaba irme de allí, porque aquella conversación me dejó bastante trastocado y me desmanteló toda las ideas que tenía claras, antes de salir de mi casa.

Al día siguiente, llamé a Ángel para decirle que no me encontraba bien, que había estado todo el día dándole vueltas a lo que pasó el día anterior y que necesitaba salir con él y despejarme. Ángel me propuso dos planes: O bien, ir a la Feria de Gibraleón; o bien, ir a la feria de Aljaraque. Me tiró la segunda idea, y le propuse ver el ambiente que había en Aljaraque.
En un momento dado, si en Aljaraque, no hubiese habido buen ambiente, tiraríamos para Gibraleón.
De hecho, cuando llegamos Aljaraque, nada más que había 6 canis contados (casi literal, mi expresión) y el recinto ferial no mediía ni 30 metros.
Entonces llegó el momento crítico: ¿Qué hacemos?
Ángel, que es muy mamón, porque realmente es muy mamón, jaja, me propuso en seguida:

¿Vamos para Punta Umbría? jajaja.

Ufff, aquellas dos palabras sonaron como una bomba de relojería para la situación en la que yo me encontraba en aquel momento. Evidentemente, la sensación que entró en aquel momento, cuando le asentí la propuesta, fue la del morbo. El morbo de ir a Punta Umbría y no saber qué iba a pasar si iba, me atrajo bastante, tanto que siquiera le propuse la alternativa olontense de aquella noche, de ir a Gibraleón.

Rumbo a Punta Umbría, mis comentarios estaban centrados en decir que seguro, seguro que aquella noche se iba a liar. Que seguro que iba a ver allí a gente de la comparsa de Francis Tinoco y que no iba a poder aguantarme al final. Aquello era entrar en "Tentación city". De hecho, nada más entrar en Punta Umbría, al primero que vimos fue a Paquito el Catalino que salía de su plazoleta en dirección a la feria. Paramos el coche, lo saludamos y volvimos a poner marcha para ir a la feria.
"Una señal", en toda regla. Ya me temblaba todo el cuerpo después de aquello y me preparaba para la que se me avecinaba.

Nada más entrar en la feria, nos pusimos a dar vueltas. El sentido humano del morbo, nos llevó en seguida a la misma caseta donde el día siguiente vimos a Carmelo Cazorla.
¡Estaba allí de nuevo!
Nada más vernos, comenzó una nueva conversación que fue lo corta que se esperaba que fuera:

Carmelo: Hombre ustedes dos por aqui otra vez. Que te gusta Punta Umbría en Juanfran jajaa. No puedes vivir sin Punta Umbría jaja.
Juanfran: La verdad es que no.....(con tono entre serio, tímido y casi aterrado)
Carmelo: Jajaja entonces te vas a venir con nosotros al final a la comparsa?
Juanfran: Pues sí, no te puedo decir que no.
La cara de Ángel fue un poema ante lo que estaba pasando en aquel momento.
Carmelo: Pues si quieres, mañana llamó a Francis y se lo comento.
Juanfran: Vale. Dile a Francis que me llame y me comente qué es lo que va a hacer.
(Nos dimos los teléfonos móviles y se terminó la conversación despidiéndonos).

Ese día estuvimos más tiempo en la feria y la noche no tuvo otro tema de conversación que lo que sucedió en aquella caseta de la feria de Punta Umbría.

Al día siguiente, no paraba de pensar en que Francis me iba a llamar para decirme si había hablado o no con Carmelo, si realmente podría yo entrar en la comparsa o no como decía Carmelo y qué pasaría con todo este asunto.

Al ser casi las 7 de la tarde y no llamarme Francis, decidí llamarlo yo con el número que, inteligentemente, le pedí a Carmelo la noche anterior, por si pasaba esta situación.
Lo llamé y me puse a hablar con él sobre quien era yo y lo que había pasdo la noche anterior. Francis me comentó que esa misma mañana lo llamó Carmelo Cazorla y le comentó el asunto.
Entonces, el ya entró en comentarme la situación: Él realmente quería meter a un púa en la comparsa, era lo que buscaba para completar el grupo, lo que pasa que tenía que esperar a reunir a la comparsa para ver si se marchaba alguien, ya que sólo en ese caso, podría meter a alguien en la comparsa.

Yo le comenté, en mi situación, que no podía esperar mucho tiempo para saberlo porque estaba ya en un grupo y no quería que empezase los ensayos de vuelta de Verano para irme de la comparsa, ya que iba a tomar una decisión muy muy dificil.

Él entonces me comentó que iba a intentar reunir a toda la comparsa, en el plazo de una semana y que ya me llamaría y me comentaría si entraba en la comaprsa o no.

Bien, una semana de espera. Una semana en la que si Manolo Corsero me llamaba para avisarme de una fecha en la que se reanudasen los ensayos, tiraría por la borda toda la historia esta de entrar en la comparsa de Punta Umbría.
Sin embargo, fue al día siguiente, el Martes, cuando Francis me llamó, mientras estaba viniendo de la playa con Kiko (que además salía conmigo en Dimes y Diretes y le había comentado ya la situación en la que me encontraba. Kiko me dijo que no veía bien la situación, pero que hiciera lo que estimase oportuno. ¿Cómo cambian las circunstancias cuando uno se vé en la situación verdad amigo mio berberisco? jaja. Te quiero mamón).
Francis entonces me dijo que ya formaba parte de la comparsa. Por lo visto, iban dejar de contar con uno de los componentes de la comparsa, Antonio "el pulpillo", con el que habían tenido algunos problemas a nivel interno.
Ya formaba parte de la comparsa de La Tarantela y lo primero que hice fue llamar a Manolo Cordero y comentarle la situación. Le dije que estaba muy agusto en la comparsa, pero que me habían propuesto salir con la comparsa de Punta Umbría y que me tiraba mucho esa idea de salir con Punta.
Manolo me dijo que lo veía bien y que aceptaba mi decisión. Al menos, en un principio, fue su postura.

Con lo cual, dejé cerrada la decisión y ya, una vez que la tomé, comenzaron a caer comentarios por todos los rincones del mundillo carnavalero...se publicó la noticia en los distintos blogs y foros y...

CONTINUARÁ !!

viernes, 8 de abril de 2011

Para Juan José Medina Romero

En respuesta a esta entrada de tu blog:

EL VALOR DEL TRIUNFO
Muchas veces me he preguntado, que valor tiene el triunfo, y en cierto modo, el triunfo es efimero y en esto del carnaval solo dura un año, y en ocasiones incluso menos, pero despues de una conversacion hoy con un amigo carnavalero, me ha hecho plantearme otra pregunta, y es la siguiente, que serias capaz de dejar en el camino por el supuesto triunfo?????????

Pues en esta fiesta hay gente, que es capaz de dar su palabra a un grupo, y seguidamente irse a otro grupo, incluso sin haber llegado a ensayar, y mucho mas no siendo la primera vez que hace lo mismo, y todo ello por un supuesto triunfo, que por experiencias vividas al final nunca llega, lo que esta claro es que la gente es libre de hacer con su vida lo que le la real gana, pero hay que tener en cuenta que puede llegar el dia que se hayan cerrado tantas puertas, que no te queden sitios donde llamar, eso si siempre quedaran pueblos lejanos donde buscar el triunfo, pero como he dicho antes el triunfo es efimero, y la lealtad y la palabra son valores que cualquier persona debe de llevar por bandera, y eso no lo da un premio solo se aprende viviendo, y equivocandose y por lo visto el hombre es el unico animal que cae dos veces en la misma piedra, pensad que el valor del triunfo nunca jamas puede superar el valor de.............................



He intentado responderte a esto que te voy a decir por un comentario en tu blog para que pudieras responderme con posterioridad en el mismo, pero mejor hacemos una cosa, ya que no consigo iniciar sesión en mi cuenta de google para poder activar comentarios:
Yo te expreso aquí mi opinión sobre tu entrada y de camino te dejo mi número de movil 676572424 por si quieres tratarlo por teléfono o en persona y continuamos tratando el tema de la forma que quieras.


Voy a lo que iba. He de decirte Juanjo, que cuando hablas y cuestionas las razones por las que me he ido a salir a Isla Cristina, creo que deberías haber tenido, antes, una serie de cuestiones en cuenta:

1) Mencionar el nombre de la persona a la que te estás refiriendo desde un primer momento.


2) Una vez mencionada la persona, si vas a hablar sobre la intención de sus actos, formularte, antes, las siguientes preguntas:
¿Conoces realmente la intención por la que me he ido a salir con Fran Sosa?

Yo creo que nadie es capaz de conocer las intenciones de los demás. Las intenciones forman parte de nuestros pensamientos y llegar hasta el pensamiento de otra persona es un proceso muy complicado.

Creo que antes de juzgarla, como no se pueden conocer los pensamientos de los demás, existe una formula muy sencilla para conocerlos: preguntar directamente a la persona.

3) Como no me has preguntado, entro de lleno ahora a decirte que si entras a juzgar mi decisión como y la titulas como "el valor del triunfo", deberías justificar por qué razones piensas que mi decisión se debe a esa razón y no a otras.

Finalizo las cuestiones que quería comentarte y entro en detalles.
Si me hubieses preguntado directamente a mi: Oye Juanfra, ¿por qué te has ido a salir con Fran Sosa a Isla Cristina?

Sería una pregunta a la que me costaría responderte. Del tirón soltaría un suspiro y trataría de soltar las primeras palabras con una de las mayores sensaciones que han permitido que tomase dicha decisión:

Los mejores momentos del carnaval 2011 los he vivido en Isla Cristina.

Realmente tendría que darte la razón cuando catalogas mi decisión como "el valor del triunfo", por que el valor de todo esto es el triunfo de ver como disfrutas de los carnavales por el cariño que recibes de la gente. ¿Verdad Jesuli, Yeye, Dieguito, Juanito, etc.? Saben de lo que hablo.

¿Por qué Fran Sosa? Primero por que desde el día siguiente de cantar en Cádiz no paró de mostrarme su ilusión porque formara parte de su comparsa. Estuvo los 3 días que cantamos en Isla Cristina en los camerinos y cada vez que he pisado Isla Cristina, no ha dudado en pedirme que lo avisara para echar el rato conmigo.
Eso me motiva más en salir con él, que todos sus primeros premios uno por uno, trofeo, tras trofeo, juntos

Yo creo que lo que te hace pensar todo lo que has dicho, es que mi forma de ver el carnaval es una forma de verla diferente, que no la consigues entender por que a lo mejor y esto es una suposición mia y no voy a asegurarla por que no conozco tus intenciones como antes bien expuse; todo lo que has volcado en mi persona, es tu pensamiento en tales circunstancias. Con esto no digo que "piensa el ladrón que todos son de su condición", sino más bien "todos los de su condición piensan que son como el ladrón".

Lamento tener una forma de ver el carnaval diferente que no coincida con la tuya y rompa con esa esquema que tienes sobre mis intenciones en carnaval, pero a fin de cuentas cada uno tenemos una forma de ver el carnaval diferente.

Por lo que veo, también tenemos un concepto de "palabra" y "lealtad" muy diferente. Para mi, la palabra y la lealtad es la que debes dar para realizar lo que realmente te gusta hacer y quieres hacer, sin miedo a represalias.

Afortunadamente, esa palabra hace que el tiempo ponga a cada uno en su sitio y la gente acabe entendiendo, en un futuro, que en carnavales simplemente lo que uno debe hacer es lo que más le guste, independientemente de lo que diga la gente.
¿Miento, Manolo Cordero? Por que sé que te estás refiriendo a eso. ¿Miento, Diego Vega? Por que también sé que te estás refiriendo a esa otra cuestión. Y con esto no dejo caer que se bajaron los pantalones al llamarme después, no. Simplemente el sentido común es un valor humano y ellos demostraron tenerlo. No es más que eso.

Te invito a que mi comparsa quede la última el año que viene y yo disfrute por mi cuenta del valor mi triunfo: el cariño de la gente, sea de donde sea.

Un saludo Juanjo.